La senadora Carolina Goic en esta columna informa
de la conformación de una bancada por la infancia integrada por senadores de
distintos partidos. En principio es una buena noticia. Todo lo que
contribuya a visibilizar, dar voz, abrir espacios en pos de los temas de
infancia desde un enfoque de derechos es digno de aplauso. Estará integrada,
además de la senadora Goic, por Patricio Walker, Jaime Quintana, Juan
Pablo Letelier, Lily Pérez, Jaime Orpis y Francisco Chahuán.
El riesgo es, claro, la banalización
de esta instancia en actividades intrascendentes, sin impacto legislativo y con
el norte sólo en el posicionamiento de sus actores en los medios.
Sería interesante, para apreciar el
valor de la iniciativa, que diesen a conocer un mínimo marco de trabajo que nos
permita a los ciudadanos sopesar en qué dirección irán estos esfuerzos.
"Hace algunos días un grupo de senadores
y senadoras de distintas bancadas asumimos un compromiso con los niños, niñas y
adolescentes de Chile, crear una Bancada de la Infancia. Buscamos con esto,
entre otros aspectos, promover el desarrollo de una agenda legislativa que
permita concretar la promulgación de la Ley de Protección Integral de los
Derechos de la Niñez y la Adolescencia en Chile, y a su vez difundir y
articular una agenda pro niñez al interior del poder legislativo en estrecha
colaboración con el poder ejecutivo.
Varios de los que integramos esta
Bancada hemos presentado distintas iniciativas que buscan proteger a nuestros
niños y niñas de los abusos y garantizar sus derechos; lo hacemos en algunos
casos, cumpliendo un compromiso que hicimos explícito en campaña, pero lo más importante
es el imperativo ético que nos impone una agenda que sin justificación ha sido
postergada. No sólo la ley de protección está pendiente, la creación del
Defensor del Niño, las modificaciones a la actual institucionalidad del
Servicio Nacional de Menores, la realidad de muchos niños y niñas
institucionalizados que no pueden seguir esperando.
Presentamos esta iniciativa
transversal en conjunto con los diputados y diputadas que se han comprometido
en este tema, porque aquí necesitamos del máximo de coordinación y voluntades
en el ámbito legislativo, pero también lo hicimos poniendo al centro la voz de
los niños y niñas, poniendo al centro su participación. Ellos, con sus palabras
y con una fuerza y claridad que impresionan, nos sintetizaron los resultados de
la consulta nacional. Esta se efectuó a través de 34 talleres,
desarrollado en diez regiones de nuestro país, en donde tomaron parte un millar
de adolescentes que reflexionaron sobre el futuro y su mirada hacia el año 2030
en Chile, y el rol y las tareas que debería el Estado realizar para alcanzar
las metas planteadas.
A través de sus reflexiones, sueños,
anhelos, ellos nos dicen que “En el año 2030 quieren que los niños, niñas
y adolescentes del mundo tengan los mismos derechos que los adultos”, como a su
vez que “En el 2030 sean respetados y escuchados en todo el mundo, que tengan
una mayor participación en la sociedad y que así se les escuche y respete mucho
más que ahora”.
Pero van más allá, también se
involucran en temas contingentes, y piden que el Estado de Chile les entregue
una “Educación gratuita y de Calidad” y junto con ello que “Tengan mayor acceso
a la información para poder darse a entender con argumentos válidos y aceptados
por los más ligados a la política” .
La conformación de una “Bancada de la
Infancia” en el Senado, la hacemos basada en la ratificación por nuestro país,
el 14 de Agosto de 1990, de la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN),
promulgada como ley de la República y poseedora de rango constitucional, por lo
que el Estado de Chile se compromete con el cumplimiento, respeto y garantía de
los derechos humanos que allí se consagran. Nuestro desafío en este
marco, junto a una infancia que está vigilante, quiere participar y ser
efectivamente sujeto de derecho, es dar pasos concretos en los compromisos
pendientes."
No hay comentarios:
Publicar un comentario